martes, 17 de noviembre de 2009

7 de noviembre de 2009

El pasado sábado 7 de noviembre nació mi niña.

 

Inesperadamente, y con 19 días de antelación rompí aguas la noche del viernes al sábado a las 4 de la madrugada. Después todo fue como la seda. Acudimos al hospital, llamaron al personal de guardia. A las 7 el cuello del útero seguía cerrado, con lo que el médico amenazó con una cesárea como no empezara a dilatar. Con la oxitocina y la epidural, la cosa comenzó a funcionar aún mejor: ya no dolían las contracciones de más de 60 y empecé a dilatar.

 

Para las 9 de la mañana 4 cm. A las 10, 7cm. Y para las 11 dilatación completa. Entonces con ayuda de la matrona, empezamos con los pujos; pujos que no había tenido tiempo de aprender en las clases de preparación al parto. Para entonces las contracciones se monitorizaban a 120, gracias epidural por permitirme pasarlas sin dolor.

 

A la niña le faltaba aún para terminar de bajar y tras 2 horas de empujones, pasamos al paritorio. Allí tras dos empujones más, el médico dijo que venía atravesada, con la cabeza girada, así que fórceps. El médico cogió las paletas, la tijera y giró la cabeza de la niña. En dos empujones más, había nacido. Allí estábamos todos: pediatra, su enfermera, anestesista, matrona, ginecólogo, mi marido, mi niña y yo.

 

El nudo en la garganta tardó varias horas en irse, no podía emitir sonido alguno, ni podía llorar.

 

Tras 9 años de sueños frustrados, allí estaba ella que había decidido nacer al día siguiente de nuestro 10º aniversario de bodas. No podía haber mejor regalo.

 

La niña nacío a las 37 semanas y 2 días, un bebe a término, pero con bajo peso 2,330Kgr. No conseguí que cogiera pecho, puesto que se agotaba y estaba todo el día medio dormida, además cogió ictericia, la subida de la bilirrubina y era muy importante que ganara peso a toda costa, así que a biberones.

 

A la niña se le ve muy bien, está pequeñita pero tiene mucha energía, se mueve mucho. Ahora tiene toda una vida por delante.

 

Creo que aquí debería acabar la historia un diario de un FIV con una preciosa niña que nace.

 

PD. Mi médico que dijo que ahora a por el hermanito, ya veremos lo que pasa.

 

 

 

 

lunes, 2 de noviembre de 2009

Ya no queda nada.

Ya no queda nada para el 26 de Noviembre. Ya está aquí, para cuando me dé cuenta, ya habrá pasado.

Ya hemos tenido dos consultas de monitorización, y todo está perfectamente, la nena está súper activa. Las contracciones de braxton hicks me tienen machacada, se ponen súper fuertes que parece que me va a estallar la tripa, pero al menos no duelen, es presión pero no dolor.

Ya tenemos todo preparado para la llegada de la nena, sólo nos falta ella. Y me da que vendrá antes de lo previsto; es lo que dijo el médico, que con lo que nos ha costado, no vamos a esperar hasta el final a ver qué pasa. Así que me parece que no será sagitario.

He tenido infección de orina, así que me han dado dos sobres de antibiótico Menurol 3gr. Ya lo he tomado y el viernes tengo que volver a hacerme análisis.

Ahora tenemos médico cada semana. Mi niña mide ya 47cm y pesa 2,500gr.

Yo estoy cada vez más hinchada, me duelen los pies sólo con mirarlos y no me entran los zapatos. Hoy por lo menos llueve y va a empezar a refrescar, que estamos que parece agosto. Con lo bien que había llevado el peso, estoy cogiendo kilos como una bestia... quiero pensar que sólo es agua, que se irá.

Sigo tomando hierro.